EJERCICIOS SOBRE TEXTOS PARA 4º ESO D

Os dejo aquí, queridos alumnos, tres textos con sus preguntas, tal como aparecerían en examen.  Mandadme las respuestas a esas preguntas en un archivo, con vuestros nombres y apellidos, a mi correo electrónico como muy tarde el viernes día 27:

garciaceniceros@gmail.com



TEXTO 1

LOS  DOS REYES Y LOS DOS LABERINTOS

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            Cuentan los hombres dignos de fe (pero Alá sabe más) que en los primeros días hubo un rey de las islas de Babilonia que congregó a sus arquitectos y magos y les mandó construir un laberinto tan perplejo y sutil que los varones más prudentes no se aventuraban a entrar, y los que entraban se perdían.  Esa obra era un escándalo, porque la confusión y la maravilla son operaciones propias de Dios y no de los hombres.  Con el andar del tiempo vino a su corte un rey de los árabes, y el rey de Babilonia (para hacer burla de la simplicidad de su huésped) lo hizo penetrar en el laberinto, donde vagó afrentado y confundido hasta la declinación de la tarde.  Entonces imploró socorro divino y dio con la puerta.  Sus labios no profirieron queja alguna, pero le dijo al rey de Babilonia que él en Arabia tenía un laberinto mejor y que, si Dios era servido, se lo daría a conocer algún día.  Luego regresó a Arabia, juntó sus capitanes y sus alcaldes y estragó los reinos de Babilonia con tan venturosa fortuna que derribó sus castillos, rompió sus gentes e hizo cautivo al mismo rey.  Lo amarró encima de un camello veloz y lo llevó al desierto.  Cabalgaron tres días, y le dijo: “¡Oh, rey del tiempo y substancia y cifra del siglo!, en Babilonia me quisiste perder en un laberinto de bronce con muchas escaleras, puertas y muros; ahora el Poderoso ha tenido a bien que te muestre el mío, donde no hay escaleras que subir, ni puertas que forzar, ni fatigosas galerías que recorrer, ni muros que te veden el paso”.
            Luego le desató las ligaduras y lo abandonó en mitad del desierto, donde murió de hambre y de sed.  La gloria sea con Aquel que no muere.

                                                           JORGE LUIS BORGES: El Aleph.

  
1.      ¿De qué tipo es el texto? ¿Por qué?

2.      Según la respuesta que hayas dado en el ejercicio anterior,  escoge una de estas cuatro opciones y responde sus preguntas.


OPCIÓN A: SI EL TEXTO ES DESCRIPTIVO

a)      ¿Es objetivo o subjetivo? ¿Por qué?
b)      Explica su estructura.

OPCIÓN B: SI EL TEXTO ES NARRATIVO

a)      Explica su estructura.
b)      Indica qué elementos de la narración emplea.
c)      Explica qué tipo de narrador usa.

OPCIÓN C: SI EL TEXTO ES EXPOSITIVO

a)      ¿Es objetivo o subjetivo? ¿Por qué?
b)      Explica su estructura.

OPCIÓN D: SI EL TEXTO ES ARGUMENTATIVO

a)      Indica cuál es la tesis que defiende.
b)      Explica en qué párrafo se encuentra cada técnica argumentativa de las que hemos estudiado.





TEXTO 2
STEPHEN S. HALL: El último neandertal (transformado)

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Los neandertales, nuestros más cercanos parientes prehistóricos, dominaron Eurasia a lo largo de casi 200.000 años.  Durante ese tiempo, husmearon con sus anchas y protuberantes narices todos los rincones de Europa, y más allá: al sur a lo largo del Mediterráneo desde el Estrecho de Gibraltar hasta Grecia e Irak, al norte de Rusia, tan al oeste como Gran Bretaña, y casi a Mongolia en el este.  Se las arreglaron para resistir, incluso cuando el enfriamiento del clima convirtió gran parte de su territorio en algo así como el norte de Escandinavia de hoy: una helada tundra estéril, con un pálido horizonte interrumpido por unos pocos árboles escuálidos y una cantidad de líquenes apenas suficiente para mantener a los renos.
            Sin embargo, hace alrededor de 45.000 años los neandertales se hallaban acorralados por un clima cada vez más hostil, probablemente aislados en la Península Ibérica, reducidas áreas de Europa central y el sur del Mediterráneo y presionados por la expansión hacia el oeste de los humanos anatómicamente modernos en su migración desde África hacia Oriente Medio e incluso más allá.  Unos 15.000 años después, los neandertales habían desaparecido para siempre, dejando tras de sí unos pocos huesos y un montón de preguntas.  Eran una raza superviviente de seres inteligentes y perseverantes como nosotros.  ¿Fueron sus deficiencias cognitivas, sus enfermedades o problemas genéticos lo que los llevó a un callejón sin salida?  ¿Qué pasó durante ese período, alrededor de 45.000 a 30.000 años atrás, cuando los neandertales compartían algunas partes del paisaje eurasiático con aquellos humanos modernos emigrados desde África? ¿Por qué una especie humana sobrevivió y la otra desapareció?
            El tamaño y la forma de los fósiles de neandertales sugiere un físico achaparrado y robusto (un promedio de los machos de 1’60 metros y un peso de alrededor de 85 kilos), con los músculos grandes y una ancha caja torácica que albergaba unos pulmones de gran capacidad.  Un neandertal típico habría necesitado hasta 5.000 calorías diarias, más o menos lo que un ciclista  quema cada día en el Tour de Francia.  Sin embargo, detrás de sus arcos ciliares protuberantes, el cráneo escasamente abovedado de un hombre de Neandertal albergaba un cerebro con un volumen superior al de nuestra especie.  Y sus herramientas y armas eran tan modernas y sofisticadas como los utensilios fabricados por sus contemporáneos modernos que vivían en África y Oriente Medio.
            Una de las controversias más largas y candentes en torno a la evolución humana es la que aborda la cuestión de la relación genética entre los neandertales y sus sucesores europeos.  Los seres humanos modernos que salieron fuera de África hace más de 100.000 años ¿barrieron y reemplazaron completamente a los neandertales o se aparearon con ellos?  Hoy sabemos que se aparearon con ellos y no de manera aislada.  De hecho, algunas de nuestras características físicas y psicológicas provienen de los neandertales.  Las razas blanca y amarilla de nuestra especie existen por los neandertales, que eran blancos.  También el hecho de que algunos humanos actuales sean rubios o pelirrojos y tengan ojos azules es de origen neandertal.  Incluso se investiga si algunos problemas psiquiátricos de nuestro cerebro tienen su origen en nuestros genes neandertales.




 1.      ¿De qué tipo es el texto? ¿Por qué?

2.      Según la respuesta que hayas dado en el ejercicio anterior,  escoge una de estas cuatro opciones y responde sus preguntas.

OPCIÓN A: SI EL TEXTO ES DESCRIPTIVO

a)      ¿Es objetivo o subjetivo? ¿Por qué?
b)      Explica su estructura.

OPCIÓN B: SI EL TEXTO ES NARRATIVO

a)      Explica su estructura.
b)      Indica qué elementos de la narración emplea.
c)      Explica qué tipo de narrador usa.

OPCIÓN C: SI EL TEXTO ES EXPOSITIVO

a)      ¿Es objetivo o subjetivo? ¿Por qué?
b)      Explica su estructura.

OPCIÓN D: SI EL TEXTO ES ARGUMENTATIVO

a)      Indica cuál es la tesis que defiende.
b)      Explica en qué párrafo se encuentra cada técnica argumentativa de las que hemos estudiado.






TEXTO 3

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Las personas que tratan con adolescentes y jóvenes suelen estar muy hartas de una idea que se hace común y muy extensa entre los individuos de esas edades, una idea que rasga oídos y sensibilidades.  Por desgracia, nuestros jóvenes estudiantes piensan que muchas cosas de las que estudian en el colegio, en el instituto, en la universidad,… no sirven para nada; son inútiles para la vida.  Piensan que aquello que no sirva para ganarse el sustento, ganar dinero, en el futuro, es inútil.  Hay que quitar esa idea de sus cabezas.  ¡¡¡Nada es más falso!!!  Sólo sería cierto para aquellos ciegos mamotretos, personas sin espíritu ni inquietudes, que ven la vida como una estúpida carrera para ganar dinero.  Para los que pensamos que la vida es un fin en sí misma, algo que hay que disfrutar, esa idea es peligrosa porque lleva a la infelicidad.  La felicidad está en el aprendizaje, en la cultura, en conocer cosas nuevas.
            Cada idea que entra en nuestro cerebro, cada cosa que aprendemos, no es un mero dato que se guarda como si fuera un par de calcetines en un cajón.  Es algo dinámico, puesto que cada dato no es sólo respuesta, sino un nuevo interrogante hacia otra curiosidad, es una puerta que se abre en la mente hacia un mundo nuevo.  Además, hoy sabemos que la curiosidad y las ganas de saber son una tendencia de nuestro cerebro y que nuestro cerebro disfruta aprendiendo.  Es decir, la mente humana necesita esos mundos vírgenes para disfrutar, porque no se puede disfrutar sin descubrir.  Por lo tanto, debemos concluir que negarse a aprender algo porque no tiene utilidad económica es negarse al placer de vivir.  ¿Hay mayor inutilidad?
            El otro día, en una discusión con un amigo mío (ya ex-amigo, porque no me trato con animales), él llegó a no poder expresarse, a no poder manifestar con coherencia sus ideas y dijo algo así como “yo ya me entiendo”.  “¡Claro, pero los demás, no!”, dije yo.  Su mente estaba cerrada, como la de muchas personas, por la falta de curiosidad y de esfuerzo a que nos referimos; es la mente de los que se contentan por los principios currar-cobrar-comer-practicar sexo-ver la “tele”.  Mi perro ya sabe hacer todas esas cosas.
Los animales de los zoológicos no necesitan nada para vivir: ya se les alimenta y cuida.  No necesitan trabajar ni aprender, ya que todo les viene resuelto.  Pensar que sólo debemos aprender aquello que nos sea útil para nuestro sustento económico en el futuro sería igual que ser como estos animales: saber sólo lo justo para poder comer, lo demás no importa.
Un estudio de la Universidad de Girona, atestigua que las actividades culturales nos producen felicidad en un 75 % de nuestras aspiraciones (viendo el 0 % como la falta de felicidad y el 100 % como una satisfacción o felicidad totales) y, sin embargo, entretenimientos muy comunes pero que no requieren una implicación intelectual (como ver “la tele”), producen una felicidad mucho menor. 
            Recomendaba San Isidoro de Sevilla a sus alumnos: “estudiad como si fuerais a vivir siempre; vivid como si fuerais a morir mañana”.  Claro, cristalino y diáfano: ésa es la perfecta unión de la satisfacción y el placer, que supuestamente nos conducirá a la felicidad.
            De todos modos, el saber popular ya lo certifica desde que el mundo es mundo diciendo en su refranero que “no hay mayor tonto que el que no sabe lo que ignora” o que “la ignorancia es muy atrevida”.  Así es la vida.
En definitiva: ¿qué quieres ser tú?  ¿Una lechuga a la que riegan, una vaca a la que alimentan con pienso y que no tiene nada más de que preocuparse?  ¿O prefieres ser un ciudadano crítico, maduro, instruido, con aspiraciones, con pensamientos?  Pues empieza ahora, chico o chica.



1.      ¿De qué tipo es el texto? ¿Por qué?

2.      Según la respuesta que hayas dado en el ejercicio anterior,  escoge una de estas cuatro opciones y responde sus preguntas.


OPCIÓN A: SI EL TEXTO ES DESCRIPTIVO

a)      ¿Es objetivo o subjetivo? ¿Por qué?
b)      Explica su estructura.

OPCIÓN B: SI EL TEXTO ES NARRATIVO

a)      Explica su estructura.
b)      Indica qué elementos de la narración emplea.
c)      Explica qué tipo de narrador usa.

OPCIÓN C: SI EL TEXTO ES EXPOSITIVO

a)      ¿Es objetivo o subjetivo? ¿Por qué?
b)      Explica su estructura.

OPCIÓN D: SI EL TEXTO ES ARGUMENTATIVO

a)      Indica cuál es la tesis que defiende.
b)      Explica en qué párrafo se encuentra cada técnica argumentativa de las que hemos estudiado.








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